ANATOMÍA DE LA CÓRNEA DEL OJO

La córnea es uno de los órganos más sensibles de nuestro cuerpo. Representa una parte de la capa superior del globo ocular (membrana fibrosa), tiene transparencia y sirve tanto para refractar los rayos de luz como para proteger las estructuras internas del ojo debido a su densidad. En su estructura, se asemeja a un pastel de capas, que está cubierto con una costra densa en ambos lados, y el interior son capas más delgadas de pastel. La superficie interna de la torta es el epitelio interno, que está unido a la membrana de descemet, es una capa de células poligonales que están estrechamente adyacentes entre sí. La parte mediana es la estroma corneal, que consiste en tejido conectivo fibroso denso. Contiene una gran cantidad de fibrillas de colágeno, con células incluidas entre ellas, los queratinocitos. La estroma es hidrófilo, por lo tanto, si el epitelio externo o interno está dañado, las fibras de colágeno absorben la humedad y la córnea puede perder su transparencia. La capa más externa está representada por un epitelio no queratinizado de múltiples capas. Consta de 5-6 capas de células y se encuentra en la membrana basal, unida a ella por semisdesmosomas. A su vez, la membrana basal proporciona una estrecha conexión del epitelio con el estroma subyacente, que muestra una organización clara y reflexiva de los tejidos de los organismos vivos que la naturaleza ha creado de manera inusual y correcta. Pero las criaturas biológicas ideales, como el tejido corneal del ojo, están sujetos a diversos cambios patológicos en la arquitectura, que son característicos de todos los organismos vivos en nuestro complejo hábitat. Las condiciones en las que se viola la integridad de la córnea, los principios de diagnóstico de las patologías de la córnea y el tratamiento de los pacientes con sus patologías se analizarán en detalle en nuestras conferencias. […]